Alegria

Ayer estuve con Amaya en sus clases de voz, con cuencos tibetanos, de todos los lunes. He de reconocer que fue una experiencia magnifica, en la que alguien como yo, que nunca canta, estuvo dos horas cantando, es un decir, más bien emitiendo sonidos por mi boca, por lo que yo cantar, cantó poco, solo cuando meto la pata, je,je, je...

Incluso bailé, osea que yo que nunca canto ni bailo, ayer lo hize y aunque siendo sincero lo hize como un oso, fue muy terapeutico y sobre todo sentí la necesidad imperiosa que tiene mi cuerpo de desentumecerse y reestructurarse a mi nueva realidad. Que era algo que ya hace unos meses, sentí como mi cuerpo estaba muy necesitado de hacer, pues lo notaba rigido y cohibido. Me parece que tendré que repetir muchas veces.

Al final estuvimos cantando durante media hora un mantra que han creado ellos y al que han llamado, mantra de la inmensidad, y que dice así:

"Om mar, om tierra,

om viento, om sol."

Pero lo más curioso es que cuando me levante esta mañana tenía la necesidad de volver a cantarlo, pero al hacerlo mi sorpresa fue que inconscientemente cambie algunas palabras y lo canté de la siguiente manera: 

"Om madre, om padre,

om tierra, om sol."

Y al momento entendi que ese canto era en agradecimiento a nuestros padres, terrenales y cósmicos, que son los que nos han permitido desarrollar esta existencia. Por lo que lo he llamado mantra del agradecimiento. No se si tendra exito en los 40principales de Alegria, je, je, je...

Amor en todos vuestros actos.

Para más información sobre Alegría, y sus actividades: www.suenalegria.com